top of page
Buscar

Tarta de queso con mermelada casera

  • Doctor Cocinillas
  • 19 feb 2018
  • 3 Min. de lectura

Aquí tenéis la receta de uno de mis básicos de cocina para fiestas y celebraciones, la tarta de queso. Se trata de un postre que me ha sacado de más de un apuro, pues además de que suele gustar a mucha gente, no lleva casi nada de tiempo hacerlo y se puede dejar preparado con bastante antelación.

Mi consejo de hecho es que la dejéis hecha de un día para otro, así os garantizaréis que esté perfecta a la hora de tomarla y no tendréis que andar corriendo a última hora, lo cual ps supondrá un gran alivio como anfitriones.

Comentaros que la mermelada casera es opcional, siempre podéis recurrir a una comprada o bien sustituirla por un poco de chocolate fundido, miel o lo que más os guste a cada uno.

También os aconsejo utilizar un recipiente desmoldable para hacer este tipo de tarta, dado que de lo contrario será bastante más complicado para vosotros a la hora de servirla.

A continuación os dejo la lista de ingredientes (con estas cantidades podréis hacer 2 tartas como la de la foto -molde de 16 cm de diámetro- o 1 tarta grande -molde de 22-25 cm de diámetro-).

Para la base:

- 300 g de galletas María o similar

- 185 g de mantequilla sin sal

Para la capa de queso:

- 600 g de queso crema tipo Philadelphia

- 145 g de azúcar blanco

- 6 hojas de gelatina neutra

- 480 ml de nata para montar

- Ralladura de un limón mediano (o al gusto)

Para la mermelada de la cobertura.

- 300 g de frutos rojos (fresa, mora, frambuesa, arándano...) frescos o congelados.

- 75 g de azúcar blanco

- 40 ml de zumo de limón

- 60 ml de agua

- 3 hojas de gelatina neutra

Los pasos a seguir son los siguientes: 1.- Poner a macerar en un bol todos los ingredientes de la mermelada salvo la gelatina (fruta, agua, zumo de limón y azúcar). Lo dejamos así mientras hacemos el resto de la tarta.

2.- Para preparar la base empezamos por machacar las galletas hasta dejarlas casi hechas polvo (para este paso suelo ayudarme de una bolsa de plástico con autocierre y de un rodillo de panadero). A continuación fundimos la mantequilla en el microondas (ojo porque puede saltar y pringaros todo el microondas) y una vez lista, mezclamos bien con el polvo de galleta.

3.- Ponemos la mezcla de galleta y mantequilla en el molde y extendemos por toda la base mientras presionamos bien con ayuda de las manos o de una espátula de cocina. Una vez hecho esto metemos al congelador o frigorífico para dejar que compacte unos minutos, mientras preparamos la mezcla de queso.

4.- Para preparar la mezcla de queso en primer lugar ponemos a remojo en agua fría las 6 hojas de gelatina neutra. Por otro lado en un cazo grande u olla mediana ponemos el queso crema, la nata, el azúcar y la ralladura de limón, y calentamos a fuego medio-bajo hasta integrar todo bien.

5.- Una vez tenemos bien hidratadas las láminas de gelatina las cogemos y escurrimos para eliminar el exceso de agua y añadimos a nuestra olla hasta deshacer y mezclar bien (un par de minutos escasamente). Hecho esto ya está lista la mezcla y podemos apartar del fuego, dejamos atemperar unos minutos.

6.- Cuando haya enfriado un poco podemos sacar el molde del frigorífico y verter la mezcla de queso en su interior. Y eso es todo, solo queda dejar enfriar en la nevera por un tiempo mínimo de 6 horas (mucho mejor si se hace el día previo).

7.- Ya solo tenemos que terminar de cocinar nuestra mermelada casera, la cual colocaremos sobre nuestra tarta a última hora, antes de desmoldar y servir. Para este último paso ponemos a cocinar en un cazo a fuego medio-alto nuestro macerado previo. En mi caso no suelo alargar en exceso la cocción pues me gusta que las frutas no se deshagan por completo. Cuando calculemos que quedan unos 5 minutos tendremos que poner a remojo en agua fría las hojas de gelatina, que añadiremos bien escurridas al cazo una vez estén hidratadas. Unas cuantas vueltas y listo.

8.- Cuando se enfríe la mermelada la conservamos en un frasco o tupper hasta que tengamos que emplearla. No es necesario emplearla toda, eso va al gusto de cada uno. Si nos sobra, siempre se puede gastar con unas tostadas o un yogur ya que está buenísima.

Consejos: sacar del frigorífico unos minutos antes de consumir para que la base pierda algo de consistencia y sea más fácil de cortar y servir. Igualmente os aconsejo separar el borde de la tarta del molde con ayuda de un cuchillo antes de desmoldarla.

Espero que podáis hacerla pronto y os guste tanto como a mi. ¡A cocinar!

Comments


Entradas destacadas
Entradas recientes
Archivo
Buscar por tags
Síguenos
  • Grey Instagram Icon
  • Grey Facebook Icon
bottom of page